Bibiana
Degli Esposti / presidenta de la Casa
Argentina
Bibiana Degli Esposti Imagen cedida por Matías Ezequiel Garrido |
La psicoanalista y coordinadora de grupos
terapéuticos, Bibiana Degli Esposti (Santa Fe, Argentina en 1956) lleva más de
16 años realizando su profesión en España. A lo largo de su carrera ha
sorprendido con varias publicaciones entre ellas ’El enigma de lo Femenino’ en
1997, ‘Inmigración Argentina en España’ en 2010 y siendo colaboradora en el
libro de ‘Medicina psicosomática’
Actualmente, Bibiana Degli Esposti es la
presidenta de la Casa Argentina en Madrid, por lo que uno de sus labores es tratar
temas relacionados con los argentinos y los posibles trastornos que puedan
sufrir al llegar a España. La Casa de Argentina lleva a cabo programas de retorno voluntario para aquellos argentinos que quieren volver a su país de
origen tras vivir situaciones complicadas en el estado español
Pregunta.
¿Cuál
cree que son las causas para que emigren a España?
Respuesta.
Depende de las épocas de la inmigración ha habido tres momentos muy diferentes
entre 1976 y ahora. En 1976 la mayoría
de la gente vino por motivos políticos, en 1990 vino por problemas económicos
de la hiperinflación, ya que estaba el país en democracia. De 2001 a 2006 vino la gente
afectada por la falta de trabajo, por la falta de futuro y por la incertidumbre
que tenía el país.
P.
¿Considera
que hoy en día debido a la crisis económica los argentinos están retornando a
su país?
R.
El colectivo argentino fue uno de los que más tardó en empezar el retorno
dentro del grupo latinoamericano. Los ecuatorianos, bolivianos y peruanos
empezaron antes y por ello, fueron los primeros afectados. Muchos de los
argentinos se han vuelto porque no han podido renovar sus papeles de residencia
o por no tener un contrato y, como la legalización está ligada al trabajo, si
no tienes un contrato de trabajo no puedes renovar y vuelves a estar ilegal
aunque ya estuviste regularizado.
P.
¿Existen
instituciones, organizaciones u asociaciones que os ayuden?
R.
No,
los argentinos van a la misma bolsa que el resto de los latinoamericanos. No
solemos tener el primer lugar. Tal vez, Cruz Roja y Caritas, pero no hay una institución argentina propia para el
retorno, aunque estamos trabajando en ello.
P.
Los
argentinos que vinieron a España ¿vinieron engañados por alguna causa?
R.
En
general, la gente vino engañada por el fantasma de Europa. Nos engañó a todos, aunque
también a los que vivimos aquí más de 16 años. Europa promete ser un lugar
fantástico donde hay trabajo o donde hubo trabajo pero, nunca fue verdad que se
llegase aquí y te llenases de dinero, eso siempre fue mentira. En realidad, las
personas que están peor son las que vinieron huyendo de aquello y no obtuvieron
dinero para hacerse un colchón porque hasta 2005 no se legalizó el permiso de
trabajo, esto quiere decir que hasta entonces trabajaron como todos los
inmigrantes.
P.
¿Desaparecerá en un futuro?
R.
En un futuro si el sistema patriarcal fuera modificado podría desaparecer pero
no tiene ninguna pinta. En argentina por ejemplo, empiezan a hacer una ley
donde haya cadena perpetua para ello.
P.
¿Conoce
algún caso en el que hayan retornado a su país de origen porque se hayan llevado
una decepción con España?
R.
Sí,
familiares que se han vuelto porque cuando consiguieron trabajo no era un
trabajo que les permitiera tener casa y dinero suficiente para vivir y mandar a
sus hijos a estudiar al extranjero.
Yo hace 16 años que
vivo, trabajo y lo sufro también pero no tengo el mismo problema que el que llego
hace siete u ocho años en medio de la crisis.
P.
¿Algún caso?
R.
Hay casos dramáticos, como el de internamientos en los CIE, no es un tema que
se suelen mostrar a la prensa. Tratamos de canalizarlos a través del Consulado
pero dispone de muy pocos medios nacionales para movilizar.
P.
A
lo largo de su carrera en España ha contribuido con muchas organizaciones,
¿Cuál ha sido la última?
R.
He
trabajado bastante con una Asociación de Mujeres Dominicanas. Fue uno de los
primeros colectivos llamativo, ya que venían las mujeres primero y los hombres
siempre se quedaron allá.
Eso es un fenómeno
mundial de inmigración que cambio el signo porque Argentina es un país formado
por inmigrantes. En nuestro país el hombre llegaba primero, raramente llegaban
juntos el hombre con la mujer y muchísimo menos llegaba la mujer sola.
P.
¿Por qué la contrataron en la asociación?
R.
Me
contrataron en la organización porque detectaron varias sintomatologías comunes
porque las mujeres latinas dejaban a sus hijos y venían aquí para cuidar los
hijos de otras y eso, las generaba una angustia que se canalizaba por vías
bastantes comunes: aumento de tabaquismo y aumento de peso. Generalmente, eran
cosas que afectaban al cuerpo como también problemas de insomnio.
P.
Recientemente,
sacó un artículo sobre ‘Feminicidio’ por ello, ¿Cree que en un futuro cesará el
maltrato de género?
R.
Creo
que la muerte de hombres y de mujeres en este caso concreto no se puede poner
en la misma balanza. El feminicidio es un concepto que dice que te pueden matar
por ser mujer no por ser esa mujer que eres tú, sino como eres mi mujer siempre
te pueden pegar para que aprendas. No quiere decir que no haya mujeres asesinas
que matan a ese hombre. Lo que yo pongo en causa y todos los que estudiamos
este tema es la cuestión del patriarcado. Es un problema social que afecta o
que da impunidad a ese tipo de crímenes sea por la vía religiosa o por la vía
no religiosa.
P.
¿Se pueden llegar a curar los maltratadores?
R.
La inequidad está en la base de la violencia. Yo creo que los maltratadores
salvo casos excepcionales no son enfermos mentales por lo tanto, en el caso de los
varones no creo en su curación porque no son enfermos. Los hombres piensan que
la mujer es inferior, están convencidos de ello y como las mujeres son suyas las
pueden matar. Las estadísticas dicen que la recuperación en esos casos es
prácticamente nula. En el caso de mujeres, si se las trata y si ellas acceden
al tratamiento, salen de su situación de pérdida de autoestima.
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